Bautizad pronto a los niños

El sacramento del bautismo es siempre el primer en la vida de un cristiano. Él es el que nos hace cristianos. Él es el que nos capacita para poder recibir los demás sacramentos. Quien no está bautizado no puede confesarse, ni comulgar, ni casarse por la Iglesia... No puede recibir ninguno de los restantes Sacramentos. Si una persona se bautiza de mayor y tiene pecados mortales no se puede confesar, pero sí se tiene que arrepentir, para que esos pecados le sean perdonados al mismo tiempo que el pecado original al recibir el sacramento del Bautismo. La Penitencia o Confesión es para perdonar los pecados cometidos  después del Bautismo.

¿Por qué es tan importante el sacramento del Bautismo?

Porque, como queda dicho, nos hace cristianos, y además, nos convierte en Hijos de Dios y nos incorpora la Iglesia, integrada por todos los bautizados. Ese niño recién bautizado es tan Iglesia como el Papa, aunque no tienen en élla la responsabilidad que tiene el Papa. Pero pertenencia y responsabilidad son cosas distintas. Por eso, el Papa insistía no hace mucho en la importancia de bautizar pronto a los niños:

Bautizad pronto a los niños

decía el Papa en una audiencia con padres.